El arte de la transición
Estoy seguro de que hay muchos triatletas que piensan que tienen todo muy controlado en la fase de transición del triatlón.
En sus propias mentes se ven como unos auténticos pros. Ponen gran énfasis en el entrenamiento de la natación, la bici y correr y dejan para lo último la transición.
Y eso señores, es un gran error.
Cualquier grupo de edad o categoría en el que te encuentres no puede olvidar el trabajo de transición y su práctica, incluso para los mejores profesionales, pueden marcar la diferencia en el resultado de una carrera.
Realmente hay muchos factores a tener en cuenta en la transición además de una gran práctica para perfeccionar esta habilidad.
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Visualiza tu carrera
Trabajar el arte de la transición es un proceso muy personal.
La clave es siempre llevarlo a la práctica de la manera que lo practicas y visualizas mentalmente.
Detalles como zapatillas puestas en los pedales de la bici, el casco encima del manillar, zapatillas de correr a la derecha o izquierda, geles, gafas de sol…
Es también vital tener el orden en el cual vas a coger cada uno de los materiales en una “lista mental” que has repasado una y otra vez.
Luego está el aspecto técnico de la transición:
– Saliendo del agua.
– Sacándote el gorro de baño y las gafas.
– Corriendo hasta la bicicleta.
– Recordando dónde está la bicicleta.
– Colocarte la cinta de pecho para tu ritmo cardíaco.
– Correr con la bicicleta hasta la línea de salida para montarte en la bicicleta.
– Saltar sobre la bicicleta y ponerte a pedalear.
Esta última parte es importante, ya que deberás aprender a montarte en la bicicleta mientras corres.
No te preocupes por ello, son habilidades que se pueden aprender a través de su repetición y la práctica.
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No te desconcentres cuando bajes de la T2
Otra parte es cuando te vas a bajar de la bicicleta, sacarás un pie del zapato de la bicicleta y luego pedalearás para mantener la velocidad.
Luego deberás sacar el otro pie. Todo esto sucederá en unos segundos, unos 200-400m concretamente.
Deja todo tu peso sobre el pedal de un lado de la bicicleta y luego salta y corre hacia el área de transición..
Entrena las transiciones
El tercer aspecto de la transición son las exigencias fisiológicas y musculares.
Aquí es donde con repetición constante y entrenamiento los diferentes grupos musculares y sistemas energéticos pueden adaptarse al cambio de deporte y a la alta demanda energética de la transición.
En muchos casos la salida del agua puede ser de 1 a 2 minutos más la carrerahacia la bicicleta, el tiempo total a veces puede ser 3-5 minutos y tu frecuencia cardíaca puede aumentar considerablemente.
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Es por eso que esta parte del triatlón necesita ser entrenado.
Las sesiones de transición de alta intensidad y las sesiones de transición de nado / bicicleta y bicicleta / correr ayudarán a tu cuerpo a adaptarse a estas exigencias.
Por lo que no debes olvidar que para dominar el arte de la transición deberás practicarla como un elemento más en tu plan de entrenamiento, consiguiendo a su vez un auténtico dominio del deporte más completo del mundo: Triatlón.
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